Sunday, July 15, 2012

Primer Recital Poético 10 de 10 (Sólo para Lunáticos)





RECITAL POÉTICO 10 de 10 (Sólo para Lunáticos).
Public Event · By Lourdes Batista, Ramón Saba, Jose Alejandro Peña, Cesar Zapata, Camelia Michel, Leibi NG, Farah Hallal, Luis Carvajal, Rafael Hilario Medina y Martha Rivera Garrido.



Tuesday, July 31, 2012       7:30 PM

Laboratori​o Evolutivo de Arte Contemporá​neo, Calle El Conde #105 frente al parque Colón, al lado de Hard Rock café

Poetas que intervendrán: José Alejandro Peña, Lourdes Batista, Ramón Saba, Leibi NG, Cesar Zapata, Martha Rivera-Garrido, Rafael Hilario Medina, Farah Hallal, Luis Carvajal y Camelia Michel.


Esperamos una asistencia masiva a este magno evento para disfrutar de estas primerísimas voces de la poesía dominicana.


¡TU PRESENCIA ES IMPRESCINDIBLE!


¡Síguenos en Facebook! ¡Y di presente !

La poética de Lourdes Batista en el poemario En la Soledad de mi cama, Doris Melo




En mis años de estudiante tuve la oportunidad de conocer sobre el tema del feminismo. Desde los años en que se inician, los años cincuenta, hasta la actualidad. Me he nutrido de las escritoras hispanoamericanas y caribeñas más importantes de estas generaciones en los géneros poesía y novela.
Pero no voy hablar de ello ahora, porque el tema que me trae es sobre una mujer joven, de una sonrisa muy hermosa, que recién se inicia como poeta y de quien vale la pena comentar su trabajo poético. Se trata de Lourdes Batista la cual publicó recientemente su primer libro titulado “En la soledad de mi cama”.
Me enfocaré en algunos aspectos importantes de su poética, de los cuales la autora ya ha hecho algunas referencias en la presentación inicial de su poemario.
Se trata de destacar el papel de la mujer en la sociedad. Nos referimos a la necesidad de reivindicación que propone la voz poética en cuanto a reclamar su espacio en la sociedad.
En el primer poema titulado Piezas, la hablante se ve esparcida por el suelo, no se reconoce en los fragmentos que según ella parece un rompecabezas.

Me veo esparcida por el suelo como piezas de un rompecabezas
mis ojos apagados
la luz alzó su vuelo
como pájaro andante
…desparramada, mirando sin ver nada.

La voz parece ser una de mujer dolida y perdida, confundida… mirando sin ver nada. En un vacío perpetuo.
De otra parte en el mismo poema notamos que esa voz continúa denunciando y haciéndonos partícipes de sus voces internas, esas que gritaron verdades y que ahora no tiene fuerza ni para eso. Ella está silenciosa y callada.
Sin embargo al final del poema esta voz cambia de tono y se reivindica:

Me compongo y descompongo mi vida
…mi sexo que me guía hacia la divinidad absoluta, me purifica, me encuentra y me coloca en el push-fit.

Ella, la voz poética, refiere cómo la mujer se encuentra sin remedio atrapada entre su necesidad de tranzar con las normas que la sociedad le impone y por otro lado la necesidad de persistir en la búsqueda de un amor ideal, que como meta no es necesariamente la posesión de un amante, sino la trascendencia de ella como sujeto social y la perfección de si misma:

Miro a todos lados buscando una salida y no la encuentro, […]
Dentro de mí el cuadro es peor, me encuentro perdida en un laberinto de sentimientos y preguntas y respuestas que no llenan vacíos. Estoy perdida.

Pedro López Adorno (1970-1986), en “Coordenadas metafóricas feministas” refiriéndose a la poesía que escriben mujeres, señala que en ella se evidencia un continuo movimiento de la imaginación y a través del siglo XX, la voz poética femenina comienza a profundizar logrando trascender su ira inicial. Entre ellas se inserta Lourdes Batista, quien a lo largo del poemario manifiesta y muestra un compromiso con la mujer latinoamericana y caribeña, presentando e insertando en sus textos, por un lado la ira y por otro la transgresión utilizando diferentes máscaras como veremos más adelante.
Doris Melo
La ironía en el discurso poético de este hablante es un elemento que se cuela en algunos de sus textos:
Como podemos apreciar en el poema titulado 43%, en el que se refiere a un dios que agonizando lleva clavada una lanza en sus brazos de fuego y se lleva consigo la añeja melancolía. La ironía permea en la superficie del texto cuando refiere:

Ese silencio de luz me susurra al oído 
que volverás con la divina aurora 
trayendo vivacidad a mi alma
eclipsada por la costumbre inveterada
del debes hacer 
no ser…

Son máscaras de las que se vale Lourdes Batista para presentar en su discurso la ira y la ironía de la protagonista de En la soledad de mi cama.
Considero que muchos de los poemas de este libro dialogan y coinciden con el discurso femenino de otras mujeres poetas de generaciones anteriores y del momento. Lourdes Batista al igual que ellas, coincide en sus propuestas: reivindicar el espacio de la mujer en todos los ámbitos y denunciar en su diálogo poético. El compromiso de la mujer es lograr antes que todo, un espacio en esa sociedad donde ha sido relegada desvirtuada y marginada a las labores más simples. Se trata del discurso femenino contemporáneo.
La voz poética muestra una resistencia desde el primer verso en el poema

“Cuatro palabras”:
“[…] ninguna mujer merece ser violada
maltratada
dañada
asesinada por su homónimo de dos patas.
Dolor, odio, muerte, rabia, como un volcán.[…]Abusada es una palabra fuerte /que lleva consigo el peso de la historia del hombre. (17)
Ella propone una revolución que será lo que viene haciendo desde el inicio del libro, violentar los cánones de la sociedad para transgredir y de alguna manera lograr que no se siga maltratando la mujer, que como ella, otras recuperen su dignidad e integridad pisoteada por el hombre:

“Propongo una revolución, dentro de las palabras. Y matar, asesinar aquellas que dañan. Ninguna mujer debe ser abusada, violada, maltratada, asesinada…” (17)

En la soledad de mi cama, es un tejido metafórico feminista en el que Lourdes Batista utiliza el lenguaje como discurso del poder, de todas sus manifestaciones masculinas para desmantelar ese discurso:

“Nos fundimos y ahora no sé quién eres tú, ni quién soy yo…
Te respiro, saboreo tus olores,
Bebo de tu miel, me deleito en esta parte de tu cuerpo que me he apropiado sin permiso.
Me hechizas, alucino, grito extasiada,
Me desparramo, te abro mi alma en un sollozo…
Ahora solo quedan mis vacías palpitaciones 
En la soledad de mi cama…” (19)

La protagonista de este poemario, constantemente está violando códigos, transgrediendo espacios al entrar al orden mítico. Ella, se da cuenta de su amor y de sus máscaras en el poema Hoy:

Hoy se inicia el comienzo
O el final de mi vida, hoy 
decreto ser una mujer libre.
Dejaré la esclavitud, romperé
mis cadenas, levantaré mi 
antorcha, acabaré con una,
década, un lustro, un siglo de
Machismo patriarcal. (20)

La hablante, comienza a romper el espejo metafórico en el que ha sido mirada y juzgada desde siglos. Nos muestra, cómo ella se ha dado cuenta, de quién es como mujer y mirando consciente el paso de la ira a la ironía del que ha hablado a lo largo del poemario. Demostrando su independencia en el atreverse a ser:

“Me miro en el espejo y la mujer que veo reflejada no la conozco… 
¿Dónde está aquella joven de grandes ojos color promesa, que creía en la ternura?
Sonrío y el espejo me regala una mueca, la foto lo confirma…
Pero ¿quién soy yo? ¿Soy una catástrofe natural, un huracán, un aguacero, una lluvia que no cesa, un éter líquido, o un manantial? Pero quién es esa mujer, que me sonríe, me habla, me saluda? No la puedo recordar.
Los años suman, los sueños bajan… Me miro en el espejo nuevamente y no veo nada […]”

Lo fabulado en el discurso de la poeta, opera distinto a lo esperado en el poema titulado “Reafirmo”, esperar a que el amor llegue. La protagonista sale a buscarlo. Afirma, que no se anima a amordazar sin compasión a su conciencia. De tal manera, que se revela a la mordaza que la reprime y se abre a esa otredad:

“Reafirmo que te amo con perversa locura,
los ruidos que pueblan el camino
se evaporan cuando escuchan tu voz.
Mis fálicos pensamientos caminan
un sendero que llevan a tu risa,
Mis ojos se pierden detrás de tu luz
en la pérfida noche,
Y mi boca que no calla palabras 
Solo sabe de ti…” 36

La alusión sexual está implícita en el discurso de algunos poemas en el texto de Lourdes Batista. Es un canto rebelde en el que la protagonista se resiste a la subordinación ante el varón. Así, vemos como, el poema Hoy, en este mismo discurso como la voz desplaza las funciones tradicionales, metafóricamente, algo diferente a lo esperado por una mujer. Ella no solo transgrede con estar arriba sino que encontrara el punto G ese lugar sensible de la mujer para provocar todos los orgasmos que ella quiera sin necesidad de someterse por debilidad ante el hombre:

Hoy estaré arriba, tendré un orgasmo,
encontraré mi punto G, 
orinaré de pie y maldeciré 
el síndrome PM…
Hoy seré auténtica, no miraré
al qué dirán, hoy viviré mi vida, 
Hoy existiré…

En los versos del poema anterior, se transgrede con lo bajo, orinar acción de degradar utilizado en la Edad Media como símbolo de acercarse a la tierra .
Lourdes Batista, provoca una nueva mitificación en el discurso femenino, es una situación sistemática y desmitificadora del discurso masculino, que la voz autoritaria maneja valiéndose de los recursos literarios que conoce asociado al discurso masculino.
El poemario es un continuo desgarrar de la memoria de esta hablante, el cual esta lleno de imágenes y de la palabra. Igual que de libertad de formas verbales, que la voz aprovecha para lograr su cometido, y de esta manera desconstruir el discurso del poder, en un desafío aceptado de todos modos Ella, la poeta Lourdes Batista con este poemario y su discurso transgresor, logra este cometido invadiendo precisamente un campo en el que la mujer ha jugado un papel sumiso y ambiguo.
Después de analizar el poemario de Lourdes Batista entendemos a la luz de las demandas y planteamientos que hace la voz poética, la misma irrumpe desde un principio con suavidad en un discurso un tanto irónico. Esa voz en la medida en que entramos en el poemario se hace sentir más transgresora.
A Lourdes Batista le interesa desmitificar esa mujer que no habla, que es su otredad. Esa mujer que todavía permanece relegada en la sociedad patriarcal. La poeta se vale de la alegoría en su poemario que no es más que esa mujer, ella misma. La que irrumpe en ese espacio, y en un canto y otro contra canto denuncia, transgrede, ironiza y juega con el erotismo a veces para atreverse como mujer y con esto dejar bien claro a través de la metáfora del espejo esa otredad que reclama un espacio de igualdad.



Bibliografía

Obra de la autora
Lourdes Batista. En la soledad de mi cama (poemas). Editorial Búho. 2012

Bibliografía General
Gelpi, Juan. “Especulación y remotivación en Fábulas de la garza desangrada de Rosario Ferré”. En Gilbert Paolini, La Chispa. ´85. 6th Lousiana Conference of Hispanic Languages and literatures. New Orleans. Tulane University, 1985. 125’132


Por : Doris Melo Mendoza.
2012
Universidad de Río Piedras, Puerto Rico.

Presentación de mi poemario En la Soledad de mi cama, por el Maestro Ramón Saba


Presentación de la obra en la soledad de mi cama en la XV Feria Internacional del Libro en República Dominicana



Es indiscutible que la red cibernética denominada Facebook, ha sido responsable en gran medida de muchas de las relaciones actuales que los pobladores del planeta Tierra hemos cultivado en los últimos años a través de la internet. En ella hemos reencontrado viejos amigos, parientes que por múltiples razones emigraron y con quienes habíamos perdido contacto, nuevos amigos y sobre todo una marejada inconmensurable de escritores (establecidos y noveles) que han aprovechado esta herramienta global para difundir sus obras.

Fue gracias a este extraordinario recurso de la comunicación global que conocí a Lourdes Batista, hermosa e inteligente periodista y poeta dominicana que emigró a Estados Unidos de Norteamérica, donde dirige su propia empresa y educa su familia. Iniciamos una hermosa amistad virtual porque fui impactado por su indiscutible vocación literaria, así también por sus definidas preferencias temáticas: Lo erótico en su manifestación más pura, la indiferencia social que socaba la humanidad y su identidad con el género femenino que defiende con fiereza de tintorera.

Mis comentarios a sus poemas eran tarea obligada, porque fui cautivado por la excelencia de sus escritos y su decidido compromiso con estos temas que transitan por sus instintos de poeta decidida.

La poesía de Lourdes no navega sola, va acompañada permanentemente de sus gritos eróticos, es reflejo de sus amores y desamores, de sus insatisfacciones sociales y de su convicción de mujer con una misión de lucha en defensa de su género, cuyo marco teórico no tiene limitaciones para ser expuesto con la crudeza que su propias vivencias han experimentado pero revestido de la sutileza que hilvana con palabras bellas y frescas propias de una artista refinada.

Lourdes no detiene su camino en las redes sociales sino que se decide a parir su primer vástago poético en medio de un parto sin fronteras. Residiendo en Estados Unidos contrata los servicios de la Editora Búho de Santo Domingo para imprimir su primera entrega a la que bautiza coherentemente con el nombre de En la soledad de mi cama, en cuyas páginas figuran 30 apasionados poemas, apoyados por consecuentes y bien realizadas ilustraciones del artista plástico dominicano Yoni Cruz que incluye un dibujo de una foto referencial de Pedro Méndez, fotografía de la autora por Carlos Sánchez y un excepcional prólogo del poeta Leopoldo Minaya.

En el poema Metus de este naciente volumen, encontramos unos versos que rezan:

Fui tuya, fuiste mío
en una entrega donde el destinatario no tenía dirección:
los besos se perdieron en el camino,
no registro el sabor de tus labios.

...que muestran con delicada claridad los sentimientos de esta poeta y su estilo directo de exponerlos.

Es fotográfico el contenido del poema que pare el título a su primera obra poética En la soledad de mi cama:

Hoy amanecí encantadoramente mojada en mis pensamientos de ti.

Así mismo continúa en otro verso del mismo poema:

Me hechizas, alucino, grito, grito extasiada,
me desparramo, te abro mi alma en un sollozo…

...forma sutil y magistral de describir una acción que experimenta frecuentemente todo ser viviente en la intimidad de su soledad.

Mi sexo te reclama, estoy perdida;

Hoy estaré arriba, tendré un orgasmo, encontraré mi punto G;

Por qué pelearnos si compartimos en un lugar donde no transcurre el tiempo; 

nuestros sexos lo dicen todo, ellos bailan una danza que reinventa el milagro.

Y Recorrí tu cuerpo habitado por fantasmas, derramaste en mí tus sueños.

...son sólo algunos versos que engalanan el contenido erótico-romántico de la poesía de Lourdes en su naciente obra.

Otros versos que muestran a la mujer desde la óptica humanista se encuentran en dulces poemas como Mujer Frente al Espejo: “Sonrío y el espejo me regala una mueca.

En Gea palpita con fuerza la guerrera que sueña con un mundo más justo para la mujer: “estamos matando nuestro hogar, entonces me pregunto: ¿ Para qué sigo viviendo esta vida ausente de ternura ?.”

...o en Culpables donde su grito soberbio por la impotencia hace temblar la página en que fue escrito: “Actúo como político de mierda que dice mucho y no dice nada.”

En el libro completo se respira la valentía de esta autora, que no se atemoriza ante los tabúes que tradicionalmente arropan a temas de esta naturaleza, producto de la manipulación de mentes retrógradas que indiscutiblemente son menos cada día, como bien dice el prologuista Minaya: “Toda literatura es testimonio de su tiempo. Las censuras y prohibiciones a que el sexo –como realidad y como mito- se han sometido desde siempre… ceden significativamente en los umbrales del siglo XXI…”.

Nuestra periodista y escritora Alicia Estévez precisa que “Lourdes Batista es capaz de expresar con poemas llenos de pasión, belleza y osadía, los pensamientos de nuestras mujeres sobre el amor, el sexo y la injusticia social aunque nunca los manifiesten con palabras.” y esa cita me lleva a reflexionar que En la soledad de mi cama no es un libro nuevo, es un libro que leí hace mucho tiempo, mucho antes incluso que la palabra naciera; lo escribió toda mujer temerosa del hastío, la soledad y el maltrato pero que no se atrevía a publicarlo por las ataduras y convencionalismos propios de una época liderada por convencionalismos absurdos, pero por suerte en vías de extinción.

Agregar más a esta presentación de la primera producción bibliográfica de la periodista y poeta dominicana Lourdes Batista, debe ser una acción que lleven a cabo todos los que adquieran esta obra, cuya lectura recomiendo totalmente en la seguridad de que este libro es un encantador despliegue de buena poesía.


RAMON SABA

Cosas de Duendes: "Compañera" Ejemplo de una amistad para toda la vida....



Cada vez que Lourdes sacaba un cigarrillo de la cartera, yo tomaba la caja de fósforo que ella había pedido al mozo del bar y le encendía el cigarrillo.Teníamos menos de veinte años y muchas ínfulas de mujeres fatales. Nos habíamos conocido en la universidad y el clip fue automático. De ella me encantó que pese a que en aquella época, ahora es una modelito, tenía algunas libritas de más, irradiaba seguridad y coquetería.
Daba la impresión de que esas libras no le importaban en absoluto. Como venía de la izquierda, su manera de hablar estaba marcada por ese estilo revolucionario que a mí, recién llegada de El Seibo, me había enamorado de la UASD. Así que Lourdes siempre me llamaba compañera, un calificativo que yo también asumí para ella y con el cual nos seguimos tratando 27 años después de que comenzara nuestra amistad en un aula llena de soñadores.Cuando estando en la oficina oigo del otro lado del teléfono que alguien dice “compañera”, sé que se trata de la amiga junto a la cual he pasado más pruebas en mi vida. Una especie de hermana que llegó en envoltura de lujo, con aroma de perfume caro y sonrisa que aflora aún entre las lágrimas.Cuando me anunció que su primer hijo venía al mundo, todavía andábamos con los cuadernos y los libros debajo del brazo, pero lo celebramos venciendo el miedo. Y yo me convertí en la madrina de aquel niño que fue por primera vez al cine, cuando tenía menos de dos meses de nacido, metido en una bolsa canguro que su mamá y yo cargábamos por turnos. Ese bebé fue el bien más preciado que ella se llevó al marchar hacia el exilio económico poco después de que fuera también madrina para mí, cuando, a contrapelo de todas las veces que ambas proclamamos que nunca nos casaríamos, yo claudiqué.
En esa época, pese a que aún no había correos electrónicos ni servicio de larga distancia casi gratuito, como ahora, seguimos siendo amigas aunque pasaran meses sin saber una de la otra. Su llamada por mi cumpleaños llegaba sin fallar y a ella la mía, excepto una vez que aún me echa en cara.Cuando nos juntábamos los temas no se agotaban. Había que contarse la vida entera. Acontecimientos de años. Ella se casó más de una vez, llegaron dos princesas a la casa, y aunque las obras literarias seguían durmiendo en la cabecera de su cama, el sustento le llegó por otro lado, por los números. No tenía idea de lo hábil que era para los negocios hasta que la vi trabajando. Una mezcla rara, me dije: una poeta que sabe sumar.
Lo mejor fue que los números no lograron acallar los gritos de inspiración que siguieron naciendo en su mente creadora. Continuó escribiendo y cuando el año pasado preparó, con lujo de detalles, la puesta en circulación en Nueva York de mi libro “Cosas de Duendes”, su propia obra poética ya era un embrión.Hoy ese libro, parido por una mujer particular, diferente, fiel a sí misma, será puesto en circulación en el marco de la XV Feria Internacional del Libro.
Lourdes es una de las escritoras de la diáspora invitada este año.Hoy, a las cuatro de la tarde, en el Museo de Arte Moderno, si Dios lo permite, estaré junto a la compañera que caminó a mi lado en la locura de la juventud y que, pese a los años, no me ha soltado la mano. Su obra se llama “En la soledad de mi cama”, un título que surgió durante una de esas largas conversaciones nuestras que a veces interrumpe mi hijo Jorgito para rogarme que le diga adiós a Lourdes y nos vayamos a dormir.

La Vida  27 Abril 2012
Alicia Estevez
periodista y directora del www.listindiario.com

La mujer desnuda: El poema desnudo, por Odalís G. Pérez

Odalís G. Pérez El poema desnudo tiene su origen en la palabra desnuda y en el cuerpo verbal desnudo, acentuado en el lirismo que d...